Que cada vez vivimos más es un hecho evidente. Nuestra esperanza de vida aumenta y eso también implica que deseemos vivir estos años gozando de la mayor salud posible. A pesar de los achaques propios de la vejez, no es menos cierto que esta etapa de la vida, imaginada antes más como un lastre, comienza a adquirir un tono diferente y a ser vista con todas las ventajas que la vejez realmente tiene. Y esto es gracias, fundamentalmente, a los avances en la medicina y a la actitud positiva, que hace que los ancianos sean tan felices como un joven de 18 años. Incluso a nivel cerebral. En este post te contamos las ventajas de la vejez.

Ventajas 

Uno de los grandes errores que cometemos al pensar en la vejez es asumir, de forma totalmente incorrecta, que la única forma de experimentar esta etapa de la vida es padeciendo los males asociados a la edad: el andar lento, la pérdida gradual de la visión, el declive mental, la falta de fuerza muscular, las arrugas o las canas, olvidándonos así de los numerosos atributos positivos de esta etapa de la vida, tales como:

– Felicidad: como hemos dicho, los jóvenes (e incluso los propios mayores) tienden a pensar que la vejez está relacionada con sentimientos tales como la tristeza, pero es más bien todo lo contrario. Estudios recientes lo confirman, hasta tal punto que estos señalan que la felicidad, más que depender única y exclusivamente de nuestras circunstancias actuales, sucede también gracias a nuestros recursos emocionales subyacentes, que suelen aumentar según vamos cumpliendo años.

Esto significa que con la edad aprendemos a manejarnos mejor con las idas y venidas de la vida, por lo que en la vejez somos capaces de ser más felices a pesar de la decadencia física. De hecho, una encuesta realizada en Estados Unidos revela que, a los 85 años, las personas mayores se sienten incluso más felices y satisfechas que cuando tenían 18 años.

– Sabiduría: relacionada con la ventaja anterior, el secreto para alcanzar la felicidad en la vejez es sencillo: las experiencias en la vida conllevan adquisición de conocimiento, lo que nos hace más felices. O dicho de otro modo, los tropiezos en la vida nos hacen más sabios, produciendo una mejoría en nuestras emociones.

– Salud física y emocional: otro factor que ayuda a explicar este bienestar son los avances en la medicina, que permiten a los adultos mayores mantenerse activos por más tiempo. De hecho, cuando los ancianos tienen un papel más activo en la sociedad y llevan una vida intensa, sus neuronas aumentan en número y actividad. Esto redunda en un mejor funcionamiento del cuerpo y en su estado de ánimo general, a la vez que puede prolongar la vida en siete u ocho años.

Buena calidad de vida, clave para disfrutar de las ventajas de la vejez.

Cuando hablamos de calidad de vida nos referimos a tener salud, incluyendo en este término las ventajas vistas anteriormente y viéndolo desde una perspectiva amplia: salud física y psicológica. En el caso de los ancianos, podemos considerar que su calidad de vida depende, en gran medida, de su capacidad de ser autosuficientes, que se sientan valorados y queridos y que tengan la posibilidad de relacionarse con el resto.

Esta buena calidad de vida puede conseguirse a través de acciones cotidianas tales como hacer ejercicio (destacando los beneficios de la bicicleta en la tercera edad), comer sano, realizar actividades en conjunto con sus amigos o visitas al médico regularmente.

Otro factor clave que ayuda a que los ancianos se sientan autosuficientes e interactúen con el mundo puede ser gracias a los cuidados por parte de un profesional. Por eso, en mSoluciona Granada ponemos a su disposición el mejor servicio de cuidados de mayores porque sabemos de la importancia de vivir plenamente su vejez.